Uña, vejez y videncia: EL MAÑANA no está escrito

 

Canal música pobre: interpretaciones libres de canciones, con móvil, ordenador y Premiere. Versión para el proyecto Vejez y occidente.

Se me rompió una uña, mira. Entonces fui a un vidente. Y luego tuve una riña.

¡Uña mía, uña mía!
Ya no te volveré a ver
pintada, larga y crecida…
¡Sufro! Y ya no sé que hacer…

Se me rompió la uña de tanto usarla. Por pura casualidad (no me acuerdo, la verdad) fue lo de mi uña, dicen que algo se tiene que romper de cuando en cuando pero no, yo le vi todo el sentido. Mira que yo pensé que de casualidad, nada. Me gusta tanto la Rosalía que oye, creo que me puse con la canción hasta que me cargué canción, uña y todo. 

Se me rompió la uña pero, rara yo, se me rompió de abajo arriba, en vez de de arriba abajo. No sé si me explico. Si esta es la uña (U) me dí un golpe aquí (U) (¿Dónde está el subrayado en WordPress? ¡Que no tengo, y me acabo de enterar!). Me refiero, se me rompió donde estaría el subrayado, abajo en la MATRIZ. El caso es que se me desprendió toda, madre mía, y yo decía:

  • Gracias a Dios Santo y a la Virgen Santísima [que siempre hay categorías, incluso en la divinidad] que no uso medias, porque si llego a usar medias no me duran ni un respiro.

O sea, que al final me ha crecido un poco, pero como estoy con todo esto de las lecturas del poso del café, pues me la he llevado a mí misma, a mi versión culta, porque tiro de versiones. Y es0, me voy a mi versión culta, donde dicen que está la evidencia,  y mira lo que me dijeron: 

  • Estira el dedo.
  • Que no.
  • Estira el dedo.
  • Que no.
  • Que estires el dedo.
  • Que no lo estiro, que eso es una palabrota.
    Y a ver si me iba a hacer algo que me iba a doler.
    Y luego va y me dice que la uña es España. Y yo lo vi enseguida.
  • Como que tienes una idea tan grande de la forma de España que todo cabe en la forma de España.
  • Claro, además uña, España. Las dos con la eñe.
  • Pues es verdad. No había caído yo.
  • Sí, que yo la tengo siempre en la cabeza. Y que la España nueva está empujando a la vieja, me dijo. A mí, quería decir, claro. Porque la vieja soy yo.
  • Mira… Tiene forma…
  • ¡Pero si la vieja está mas nueva que la nueva, que está reluciente, como si le hubieran hecho un buen fregado! [En este punto, hay que fijarse en la foto.]
  • Eso es solo la apariencia. Porque la vieja parece nueva, pero tiene mal la matriz.

Y venga con la matriz. Y yo pensando:  para qué vengo al uñólogo, tenía que haberme ido al ginecólogo, ya me lo dijo mi amiga del alma, que todo viene de ahí,  que eso nos trae a todos de cabeza, se te pocha y mira…

Bischofberger U (2024) Papelillo con forma de España (Arte digital)

  • Ah, pero ahí no terminó todo. Encima. Aparte, que yo la uña ya me la había cortado por abajo, o sea, no por donde se corta, sino por donde sale en la foto que te pongo, por la parte de abajo cuando esa parte de abajo se me había quedado suelta por arriba. Eso, ya decía yo, tendrá un sentido. Pues el doctor, que no se lo encontraba. 
    Lo que pasó después fue que se pone a decirme no sé qué de que la uña y yo formamos… A ver, que me lo apuntó en un papelillo, mira. Aquí lo tengo en el móvil.
  • Léemelo.
  • Que si España, a ver qué, es que yo sin gafas no veo bien.
  • Es unidad de destino en lo…
  • ¿En lo qué?
  • En lo universal, dice.
  • Y eso qué es.
  • Pues el destino.
  • Digo, lo universal.
  • Lo universal, será…
  • Será algo de sal.
  • Que no.
  • Que te digo yo que sí.
  • Que no. 
  • Que sí. 
  • Pues mira, que yo le veo también la forma al papelillo.
  • Pues no sé.
  • Lo ves si te fijas, mujer. Hay que fijarse.
  • Pero has cogido una parte que no es.
  • Bueno, eso no importa. ¿No ves que la tierra nace del mar? Lo vi en un reportaje. Pues es que se ve que de ahí nacerá más España.
  • Tienes razón. No sabía, como  tú de móviles no entiendes ni papa…
  • Qué pasa ahora con el papa, que lo traes a cuento.
  • Anda, déjame.
  • Mira, tesoro: me voy a la vidente que tengo y que mejor me lea los posos del pozo, que está más seco que la madre que lo parió.
  • ¿Yo?
  • Sí, tú, quién va a ser.
  • Ya estás entrando en menudencias y sacando los pies del plato. ¡Ya estamos!
  • Te mato y no te mates que me muero.
  • Ponte de una vez a estudiar y cállate, que pareces el software, no paras de echar renglones.
  • ¿Me estás llamando cotorra? Cotorra tu madre. Que yo hablo si me sale del…
  • Anda, y vete a la inteligencia artificial ésa y a ver qué te cuenta, que parece que ya no tienes más que ojos para ese robot. Que yo aquí con todas a comer pipas,  que vamos a dejar el suelo empipado de cáscaras mientras tú te vas decidiendo. Floja, floja, más que floja.
  • Pues sí, me voy con la IA, que ahora es el referente.
  • Referentes te voy a dar yo a ti.
  • Anda ya.

Y el anda ya es total, y el final. Porque mi uña es nacionalista como ella sola. Porque forma una unidad de destino en lo universal conmigo. Porque no se separa nunca de mí, y me tiene una fidelidad inquebrantable, Porque mi uña ocupa un espacio único. Mi uña está siempre situada, situada en mi dedo, en su territorio, en mi cuerpo. En el fondo, si lo miras bien, también en mi salva sea la parte. Mi uña, en suma, es artista. Esto es: mi uña y yo somos hermanas. Aún más:  mi uña, España y yo somos fabulosas, y trillizas.

Y colorín cololado, el futuro no está escrito, pero el cuento sí, y el de mi uña se ha acabado.

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