El privilegio masculino como compensación, y otros apuntes sobre identidad y género

No se trata de generar incomodidad a personas concretas sino de apuntar a las desigualdades estructurales para que podamos vivir todos mejor; de dejar de utilizar la culpa como herramienta y transformar las condiciones que dan lugar a esos malestares. Nuria Alabao, antropóloga.

Apuntes sobre un artículo de Nuria Alabao en la revista Contexto y Acción. En el marco de los Estudios Culturales, y en concreto desde el feminismo que nos inquieta y por el que nos preguntamos y desde el curso El futuro no está escrito II, del Aula Virtual de Nociones Comunes, he hecho estos apuntes con lo que queda de mí y un artículo brillantísimo de Nuria Alabao, antropóloga. Dedico estos apuntes a mis compis. EJEMPLOS, EN VERDE. MIS OPINIONES, EN AZUL.

APUNTES SOBRE IDENTIDAD Y GÉNERO (apuntes que no hay que estudiar, porque son, casi, preguntas)

Malestares de género: el feminismo genera ansiedad a un nivel muy profundo.

CUESTIONA LOS ROLES DE GÉNERO. Partimos de la base de que el género es una construcción social, y de que esta afirmación desencadena pánicos porque el género es central en la construcción de la identidad. Ser hombre o ser mujer es algo que aprendemos… esto es muy difícil de asumir.  (Las identidades de género se están multiplicando entre los jóvenes. Soy trans, soy no-binario, soy bisexual etc. etc. )
CUESTIONA LA IDENTIDAD, CUANDO LOS ROLES DE GÉNERO SON POTENTES ASIDEROS IDENTITARIOS. Lugares a los que las personas inseguras, miedosas, se agarran con fuerza para perder el miedo.
Todo esto se relaciona con la fragmentación de la identidad en la que vivimos todos, por la que parece que nuestro ego está en una montaña rusa: hoy soy tal, mañana cual, ahora me gusto, después me disgusto, tengo que demostrarme esto o lo otro, quién soy en definitiva. 

¿Cómo es mejor enfrentarse a esa ansiedad?

No sabemos todavía.
Yo creo que, por supuesto, el método no va a ser ir a saco «feministas y unidas al ataque», sino promover el conocimiento. Y es que todas estas experiencias son difíciles de asumir a nivel consciente, y de construir conceptualmente a nivel racional. Los mass media tienen mucho que hacer para ayudarnos a afrontar las ansiedades del tambaleo del género. 

A la cuestión del género hay que sumar la clase, el estatus migratorio, salud mental, diversidad funcional etc.

Si no, ¿De qué hablamos cuando hablamos de los «privilegios de los hombres»? Pensemos en los privilegios de…
Un camarero respecto a la mujer bien posicionada a la que sirve. 
Un hombre sin papeles respecto a la funcionaria que le atiende. 
Un hombre ingresado en un psiquiátrico respecto a su psiquiatra. 
Etc. etc. etc. (ejemplos similares pone la autora)
Vamos, vamos, que todo esto cae por su peso. Es evidentísimo.

¿Puede entenderse el privilegio masculino como una compensación?

Explotado y humillado en todos los ámbitos como hombre, al menos, sin embargo tienes una posición superior en el orden de género.
Aquí está la raíz de todos los malos tratos. Esto del privilegio masculino como compensación es poner el dedo en la llaga. 

Algunas ideas. Para reflexionar una cada día. 

  • El enemigo no es el feminismo, es el sexismo y la misoginia.
  • El enemigo es el sistema económico y la desigualdad
  • El enemigo del feminismo es el SISTEMA SEXO-GÉNERO, no el hombre, claro que no.
  • Desigualdad de género no es guerra de sexos.
  • No debemos confundir hombre y masculinidad.
  • El hombre puede desertar de la masculinidad hegemónica.
  • El feminismo esencialista es profundamente culpabilizador, y aplasta a las personas reales.
  • En los hombres, la masculinidad genera malestares y peligros.
  • El feminismo tiene sus contradicciones: exclusiones, transfobia, conservadurismo, racismo.
  • «Poner en cuestión los roles de género»= «desestabilizar el orden sexual» es inquietante.
  • Miquel Missé y Noemí Parra en Adolescentes en transición (Bellaterra, 2023): los adolescentes expresan su malestar en este ámbito
  • El sistema de género sirve para apuntalar la desigualdad en otros órdenes.
  • Cuando a la masculinidad se unen el miedo y la precariedad, la solución es un proyecto feminista.

¿Cómo llevar los malestares de los jóvenes hacia un lugar emancipador?

No sabemos todavía.
Yo creo que está claro cómo: a través de la educación, de la educación de los jóvenes, de los padres y de los maestros. Y facilitando el acceso a toda esta jerga y a estos contenidos que, desde luego, son muy complejos. 

¿Cómo es el feminismo que queremos?

Un feminismo incómodo de verdad no es el que señala actitudes concretas, sino el que implica una amenaza a los pilares sobre los que se construye la desigualdad.

TOTALMENTE DE ACUERDO. Y perdón por haber usado, a veces, el feminismo como un arma oportunista a mi favor. 

Vocabulario (las definiciones son mías)

Heterosexista es el nombre de la sociedad en la que vivimos.
Masculinidad hegemónica es el nombre de la «parte ideológica y convenida de lo que nuestra cultura llama hombre» que nos envuelve a todos y a todas, que no tiene que ver con el hombre como tal.
Sexismo: división de las personas según el sexo en sistemas construidos de género, y establecimiento entre ellas de relaciones de poder.
Lugar emancipador. El lugar emancipador es un lugar donde hay libertad y no hay violencia.
Daños colaterales de la masculinidad: restringe posibilidades de expresión y sexuales, exigencias en cuanto a valor y competencia.
Pendiente: estudiar la pedagogía del género.
Todo este tipo de conocimiento a tantos niveles (consciente e inconsciente, etc.) y con tantas resistencias, solo se puede producir poco a poco. Por tanto, no sé qué dirán esas personas de la Pedagogía del Genero, pero habría que plantearse una estructura en árbol desde la primera infancia y seguirla a rajatabla. 

En la revista Ctxt.es,  artículo de Nuria Alabao.

https://ctxt.es/es/20240201/Firmas/45388/nuria-alabao-feminismo-hombres-identidades-clase-sexo-genero.htm

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