BORRACHOS de CLONES en Snap! (Vida de Crápula del Artista Digital)

Pública

Bischofberger U Selfie de mi infraestructura (hip!) material al término de la PAC, con tupperware teletransportado porque no tengo fuerzas (hip!) ni para sujetarlo  (Foto de iphone)

Borrachos de clones, ébrios de Snap!, la vida de perdición de los constructores de la digitalidad…
hip!
hip!
Los mundos del arte… Lo que sea que fuere… Siempre rozando los bordes, saltando los límites, tocando el vacío, hundiéndose y resurgiéndose… Así pasa con los clones de Snap!
hip!
¡Menos mal que no lo tengo descargado! Mi trabajo no hubiera cabido en mí. 

Post de mi profesor del laboratorio de interactividad, cuando le comento (¡hip!) lo que interpretaba como virus, piratas y duendes. Saturada de clones… Ejecutora (más o menos, asesina)… Que no toco el círculo rojo… Que me quedo sin memoria. En otras palabras, mi ego PAS se tambalea de nuevo y hace CATAPLÁS,  tengo una vida tan de crápula que no me extraña que el fregadero que presento como Selfie de mi infraestructura material al término de la PAC esté como está…

Úrsula, varias cosas:

  • No creo que sea problema de bloque ni de la conexión a Internet, sinó de la saturación de clones. Mira las dos notas siguientes.
  • Primer problema. Supongo que antes de ver como vestir los clones, has duplicado los objetos. Qué pasa? Que cuando ejecutas el programa (bandera verde) todos los objetos que has creado crean sus 36 clones… y por tanto tienes unos cuantos centenares de clones.
    Has de borrar objetos y dejar sólo 1.
  • Otra cosa que te puede pasar. Cuando vuelves a clicar para probar con algún cambio, si no has hecho antes «Stop» (círculo rojo en los controles) no te borra los clones que ya existen… y entonces va aumentando y aumentando… y se puede quedar el navegador sin memoria. Por tanto, entre prueba y prueba… hacer un STOP.
  • Aprovecho para comentar que las imágenes son grandes. Tienes que reducirlas… pero no hace falta editarlas. Sólo ir a la categoría Apariencia y puedes fijar el tamaño (a un 33% más o menos). Esto lo haces al principio y ya todos los clones estarán con ese valor de visualización.

Total: me he pegado un exceso de clones y estoy de resaca… y mi vida material (o sea, lo del TACTO) se escora y se me revira… El acortamiento de mi longevidad que se sigue de todo esto tiene que tener un precio… ¡Artistas del mundo, uníos! (Yo me pienso hacer el carnet de artista en cuanto acabe estos estudios. ¿Quién lo expide? ¿Hay una Real Academia del Arte o está la academia del arte en las barricadas con las Guillotinas de las Fotocopias Reales, fotocopias más reales que ninguna? Yo que seeeeeeeeee, como artista, tengo la venia del no saber si no quiero.)

Pero me encantan mis obras digitales, con las que voy a hacer una exposición en la otra asignatura (mi reina, qué digo reina, mi diosa profana particular en estos estudios de Grado) llamada Cultura visual y Nuevos Medios. Y, con la nueva exposición, me emborracharé tampoco sé de qué…

Sobre la comercialización de mis obras, he decidido que le voy a decir a la galería que el primer cuadro vale, digamos, 150 euros, los sucesivos se van abaratando porque serán obra derivada del original. De modo que el siguiente vale 125, el siguiente 100, el siguiente 75 y cuando se llegue a cero no hay cuadro, no hago más copias.
También le voy a decir que puedo adaptarlo a su casa en color, para eso me tienen que pasar una foto al movil de su sofá o su colcha y yo se lo adapto.
También les voy a decir que se lo adapto en tamaño, y entonces el precio va a ser proporcional al tamaño.

Lo pongo así, con tinta invisible, PORQUE, ADEMÁS, le voy a decir a la responsable de la galería que yo siempre he trabajado así, donde «siempre» significa «hoy» pero claro, esa es la información oculta del archivo que le vendo. Tampoco les promocionaré dónde está, de qué otra obra es obra derivada y, en fin, me guardaré mucha información POR LA CUENTA QUE ME TRAE (nunca mejor dicho), un poco como el tendero que coloca las naranjas bonitas delante y las que están un poco más feuchas detrás. 

Mis movimientos en las redes del arte… (¿material? ¿real? ¡A mí me gusta material!) los estoy haciendo para la asignatura de Proyecto III. La exposición virtual la tengo en Cultura Visual y Nuevos Medios. Pero lo que me corre prisa de verdad para el Taller de Programación e Interacción donde estoy produciendo mis obras es saber COMO SE DISFRAZA UN CLON. Y esta es mi cocina, de arte real, el arte de involucr-arte tanto que dejas los platos sin fregar hasta que te salga eso… eso… eso que sólo tú tienes en la cabeza y que ¡mierda! ¡Nunca te sale!

Y esta es la primera obra que guardo para mi exposición, titulada, de momento, «Exposición sin título», título que ya está cogido así que tendré que inventar otro. Eso también se cobra y, de hecho, me ofrezco como hibridadora de arte y texto, por si alguien me quiere contratar.

Bischofberger U (2024) Ingente trabajo detrás de los tapices del mundo digital. (GIF doméstico reevaluado en el contexto de Los Mundos del Arte)

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