3. Texturas y huellas en el Lugar del árbol sin futuro, e Inmersión en las flores.

Bischofberger U (2024) Cuando agua, viento, frío y calor esculpen. (Fotografía digital)

11/05/2024.

Esta iniciaría una colección de texturas que se podría ampliar.

Huellas de las dentelladas de la excavadora en el Lugar del árbol sin futuro.

Inmersión en las flores
Nuevo enfoque de la relación con la naturaleza.

Tirarme de cabeza en vosotras, flores. Nadar dentro de los amarillos. Saborear las texturas un poco ásperas. Inspirar, arrebataros todo vuestro olor. Tragaros a todas, comeros. Que me deis esas esencias que compartís por igual entre todas. Ese color amarillento hecho para seducir, la forma acogedora de los pétalos, el modo de estar vivas recibiendo el sol. Ay, envolverme con vosotras, que seáis mis momificadoras, perderme, olvidarme de mí y convertirme en vosotras.

Cuando, como dice el arquitecto y fotógrafo Aitor Izaguirre, nos situábamos distanciados frente a la naturaleza y la habíamos constituido como paisaje, en cierto modo estábamos posicionados en un espacio que Jaime Iregui calificaba como espacio del poder: en este caso, el poder del dominio de un ser humano «superior» frente a una naturaleza visual, distante y subordinada.

Desde la Estética Medioambiental tal como la describe Izaguirre, el espacio pasa a ser no solo un espacio vivido, también un espacio practicado. Izaguirre cita a Carlson para recordarnos que la experiencia del medioambiente se produce a todos los niveles y con todos los sentidos, pero Izaguirre añade que nuestra presencia supone, además, (y añadimos, como espacio practicado) una transformación de ese medioambiente.

Deja una respuesta