Propuestas de logos -con arte computacional

Pública

Vídeo presentación de estas ideas: https://www.youtube.com/watch?v=aEpNsfI95rc

VOLAR…

Mientras oímos la música de Anton Webern Cinq Pièces, op. 10 pour orchestre.  Ensemble intercontemporain.  Matthias Pintscher, director

«[…] se creó una ley. Hasta que las doce notas no hayan aparecido ninguna de ellas debe aparecer de nuevo… No éramos entonces conscientes del principio, pero lo habíamos sentido durante mucho tiempo.» Anton Webern

Se nos pide, desde el Taller de Programación e Interacción, que reflexionemos sobre nuestros procesos creativos en relación con el arte computacional conectándolos, al menos, con tres referentes. Esta reflexión tiene que abordar tanto lo conceptual como lo metodológico, y del encuentro entre arte computacional y procesos creativos habrá de surgir algo así como el borrador de un breve proyecto.

Primer referente y su contexto teórico

El primer referente al que me he acercado ha sido Manfred Mohr (1938), que llega al arte computacional, en cierto modo, a través de la música. Valora, en particular, la música que estamos oyendo, la música que sigue unas reglas estrictas, la música dodecafónica. Es en esta entrevista donde explica la génesis de su interés por el arte computacional, génesis que está muy ligada a las ideas de Max Bense. Lo que me ha atraído en particular es que lo dejó todo, dio un viraje radical a su vida cuando se encontró con la posibilidad de un arte computacional.


De Max Bense he encontrado este texto, en el que, de momento, no puedo profundizar, y que guardo para más adelante.


En este texto, que considero muy importante, aparecen conceptos que prefiguran lo que hoy es la Inteligencia Artificial: programación, probabilidad, lenguaje… aunque también se despliega una visión de la ciencia en cierto modo cosificada e idealizada, que creo que actualmente está superada.

Este es el instagram de Manfred Mohr, y la obra de este gran visionario, pionero y apasionado del arte computacional que elijo es ésta, reciente, de 2019: computer generated painted metal relief. Manfred Mohr no es tanto un autor prolífico, como Picasso o Tapies, sino un descubridor; cuando él llegó al arte computacional, nadie se planteaba, siquiera, ese destino. Ahora estamos todos con él, como este segundo referente.
Personalmente, admiro casi más a los visionarios, a los pioneros que nos desbrozan el camino y que tienen una valentía un tesón enorme en sus búsquedas (que suelen ir a contracorriente), que a los creadores puros, que estallan en creación constante desde todos los puntos… Por eso he escogido a Manfred Mohr.

Segundo referente

Os pasaré todas las cuestiones técnicas por el foro, y le preguntaré dudas a nuestra profesora Mónica Rikic Fusté.

ATERRIZAR

Tercer referente muy cercano a mi realidad

¿Cómo veo que pueden estos referentes atravesar mi proceso creativo? Lo veo muy dificil, fundamentalmente debido a la carencia de recursos. Por supuesto, no tenemos impresora 3D. Por no tener, no tenemos en casa ni caballete, ni por supuesto estudio de artista. Tampoco tenemos conocimiento de lenguajes de programación, ni siquiera las herramientas básicas de las que disponen los profesionales del diseño. Bueno, y hablando de lenguajes y lenguas… ¡El inglés! ¿El inglés, cómo lo llevamos? Personalmente, me estoy iniciando en la Suite de Adobe y esta iniciación está siendo obstaculizada por el precio del aprendizaje, y por el precio de la suite.

Preferiría un cuartucho, que tampoco tengo. No digo que no haya talentazo. ¡Talentazos y talentazas! Pero el talentazo, aunque esté regado por la sabiduría de la UOC,  está plantado en la pura piedra, y lo que puede salir de él es, más o menos, una patata pocha. De modo que mi último referente es tan modesto como yo misma, está online y es accesible en un clic. Se trata de lo que he encontrado que puedo hacer con Snap!, y de mis propias obras.

En primer lugar, cómo hacer una tela de araña programando con Snap!
En segundo lugar, mi obra de arte, también hecha con Snap!, llamada Insectos tipo dinosaurio, viejos y marrones, avanzando hacia Snap!
Y por último, con unos restos de un ejercicio que hemos hecho en clase, como estoy tan acostumbrada a aprovechar los restos en la vida real (no tiro ni el limón mohoso que se queda en la puerta de la nevera), esta otra obra mía llamada ¡Toma lengüetazo, Snap!

Estas obras son obras viables, expresivas y me gustan. Creo que no hay que ser purista, y se puede usar el arte computacional para hacer un elemento, y después un corta pega y completar dicho elemento con otros… «Lo mejor es enemigo de lo bueno», también en arte. Pienso hacer eso, y eso he hecho en estos dos últimos trabajos que os he compartido, me ha gustado hacerlo y, por supuesto, soy libre de hacerlo.

Mi borrador de proyecto final: mis planes con el arte computacional

De estas primicias, y en consonancia con mi proyecto en la asignatura de Proyecto III, voy a continuar con mis ensayos absurdos… Y voy a hacer un ensayo absurdo de arte computacional que voy a llamar LOGOTIPOS ALTERNATIVOS. Como dibujar en redondo con Snap! es viable, creo que mi proyecto lo será también.

Por ejemplo, un logotipo alternativo es esta Alternativa a la esvástica. Y así, iré sacando cientos de logotipos para agregar un libro a mis series.
Un saludo a todas y todos,

Úrsula

Bischofberger U (2024) Alternativa a la esvástica réqueterrequeteultra (Arte computacional)

 

Deja una respuesta